jueves, 29 de septiembre de 2011

Y aunque a veces nos den bajones... nunca es tarde para decir basta.

Cuando una persona esta llena de alegría y a rebosar de felicidad no piensa en lo que vendrá después. El después es subjetivo. Siempre hay una espiral descendente cuando llegas a lo más alto, a tu alegría más deseada, tu alzeimer de las cosas malas... es duro saber que en ese "después" todo vuelve a afectar como una aguja en el alma.
Hoy he vuelto a soñar despierta. Soñaba volver por las noches y olvidarme de todo gracias a tus labios, labios deseados pero sin ahora nombre propio. Mi nombre tachado y encima de este otro que desconoce. Rabia acelerada entre mis venas saber que tus brazos rodean a otra, la abrazan y la sienten.
¿Debería sentirme así, amor rechazado? ¿Es normal lo que me pasa? Que alguien me lo diga porque moriré de espanto, me siento la mujer que puso la manzana envenenada en manos de otra, me siento mala, la mala de esta historia. Siento que hice daño, que fui egoísta y que ahora vuelve como si nada. Me siento sucia. El después es duro, yo ahora estoy en un mar de dudas... ya no me encuentro.

2 comentarios: